El ritual de Colapsados en la Sala George Harrison del Paseo La Plaza del viernes 13 de septiembre fue todo un éxito. Sin ser feriado y a pesar de que mucha gente prefiere quedarse en casa los martes y viernes 13 por superstición, la sala se vió colmada y pudimos disfrutar de un show a pleno con un público maravilloso en compañía de Checho Graiño, el invitado especial de la noche.

Para Roberto Miranda y Maxi Grillado fue un gran alivio saber que podían volver a contar con toda la infraestructura técnica de la sala una vez más. Tras dos rituales a los que les faltó la despedida a todo trapo con el video y la parodia de "Antes y Después", por fín volverían a nadar como peces en el agua y el aliciente de tener una sala llena era un incentivo mayor.

Así fue como a las 23:00 horas en punto se apagaron las luces de la sala George Harrison y, tras la cortina de presentación, Maxi Grillado se apropió del escenario para presentar el espectáculo y cantar junto a Roberto Miranda la primera canción de la noche, "Infelices en 4". Esta vez, tras la canción Roberto se quedó a cargo del micrófono para hacer su primer monólogo, que sirvió como introducción para que, minutos después, interpretaran a dúo una de las mejores versiones de "La Grieta".

Con un público al palo, llegó el turno de Checho Graiño, quien supo capitalizar al máximo la oportunidad para despacharse con diez minutos de humor sin pausas y retirarse victorioso, cumpliendo su tarea a la perfección y demostrando que conoce muy bien su oficio y sabe manejar los tiempos con mucha discreción.

El concurso de cada viernes hizo explotar al público gracias a que el participante se lució con sus respuestas y, así, llegó el momento del Top 3 de Colapsados.

Faltaban poco más de quince minutos para el final del show y ya estaba encaminado hacia el final como si los protagonistas estuvieran ganando el partido por cinco goles, así que tras el monólogo de Rober y "Después de hacer el amor", llegó el esperado final, en el que se desquitaron con creces por los dos shows en los que no habían podido hacerlo.

Así transcurrió un nuevo ritual, tal vez uno de los mejores, y ya esperamos con muchas ansias el próximo. Quedan pocos hasta fin de año... ¿te vas a quedar con las ganas?